En el Club Victoria somos amantes de la risa. Las reflexiones sobre la vida diaria que se llevan a cabo delante de un público, con el que se interactúa, se viene conociendo en los últimos años como stand up, una suerte de comedia teatral aliñada con reflexiones personales, que oscilan entre la ironía, la parodia y el surrealismo. Una buena actuación, como Dios manda, deja a los asistentes con las mandíbulas flojas de tanta carcajada y con la mente activa, cuando se hace una segunda lectura de lo que se ha expuesto… que suele llevar una carga que conviene rumiar con una cerveza por delante.
En nuestro club nos hemos estrenado en este tipo de actuaciones culturales con Marcos García. Se trata de un reputado humorista cubano, conocido como El hijo de Teresa, que ha revolucionado el circuito de comedia con su particular estilo de stand-up, cargado de ironía, ritmo y mirada crítica. Sus parodias sobre los boleros resultaron especialmente desternillantes…
Un consejo para cerrar esta nota: manténgase atento a las próximas actividades culturales en nuestro club.
